El papel anti grasa, es un elemento de suma importancia para la industria de alimentos actualmente. Pareciera que es un objeto que pasa desapercibido, sin embargo, cumple con diferentes funciones fundamentales para la venta, producción y distribución de alimentos. La historia del papel antigrasa se remonta a la misma evolución de la fabricación de empaques en general, en especial el desarrollo de la industria del plástico como respuesta a la necesidad de crear envases más aptos para la conserva de alimentos. Los envases son recipientes o papeles que cumplen con ciertas funciones técnicas, sociales y económicas para contener productos y conservarlos de agentes externos a él, preservando así su composición física y química. Además, estos permiten una correcta distribución sin causar daños a los productos. Sin mencionar que cumplen una función comunicativa.
Los primeros envases creados se remontan a la era paleolítica, en donde se dejó de utilizar empaques netamente naturales, y se comienza a manipular objetos provenientes del mundo animal. No obstante, otras fuentes remontan la creación de los empaques alimenticios a la historia de la producción del vino, en donde sus orígenes se remontan al uso de las ánforas de arcilla y, posteriormente, el barril de madera. Más adelante en el siglo XVIII con la revolución industrial, se crea en Estados Unidos la tecnología de fabricación del papel, junto con el empaque impreso más antiguo, derivado de Alemania. Éstos usados para la empaquetación de alimentos, como el cereal en cajas de cartoncillo.
En 1860 se inventa el plástico, por un estadounidense gracias a la utilización de un nitrato tratado con alcanfor y alcohol. Este se patentó con el nombre de ‘’celuloide’’. Este material ha ido evolucionando a través del tiempo, desarrollando así plásticos sintéticos termorrígidos, resistentes a la electricidad y al calor, polimerizados, hasta llegar a lo que conocemos hoy en día como los diferentes tipos de termoplásticos. La industria de los alimentos es una de la que más se ha beneficiado de dicho material, en donde la mayoría de empaques de alimentos se realizan con base a diferentes tipos de plásticos.
Por otro lado, en 1933 la empresa ‘’Dixie War Paper Company, de Dallas Estados Unidos, introduce la primera bolsa parafina, pre impresa llamada: ‘’ Dixie’s Fresheen’’. A partir de allí el papel parafinado o mantecado ha ido evolucionado en su composición física y química. El plástico cumple un papel fundamental en el desarrollo de dicho material, ya que se han realizado diferentes aleaciones, en donde se agrega plástico al papel para obtener muchos más beneficios. Es importante mencionar que el papel anti grasa no es igual al parafinado. El papel parafinado es recubierto por una cera debido un procesos térmicos en la extrusión de polímeros, y que en algunos alimentos dependiendo de su temperatura puede que derrita esta cera y se le adhiera al producto mientras que el papel antigrasa, es una mezcla de componentes químicos y junto a biopolimeros crean la trama perfecta, lo que con responde a que no sea 100% un papel.
Actualmente, el calentamiento global y la contaminación en aumento a nivel mundial, ha generado preocupación en la producción de un papel antigrasa y parafinado, no solo que responda a los requerimientos para mantener los alimentos con todas las características deseadas, sino que además, sea en su totalidad amigable con el medio ambiente. La industria del plástico, de los papeles parafinados y anti grasa se encuentran actualmente en esta constante búsqueda, y para ofrecer productos de alta calidad y 100% amigable con el medio ambiente.